¿Qué es una crisis existencial y cómo se supera?

Todos hemos pronunciado alguna vez la frase “estoy sufriendo una crisis existencial”. Es una frase con la que todos estamos demasiado familiarizados, pero no es frecuente que nos detengamos a pensar “¿Qué es una crisis existencial?”. ¿Cómo puedo saber si estoy experimentando una? “¿Cómo puedo superarla?”
 

¿Qué es exactamente una crisis existencial?

Una crisis existencial se define como un conjunto de sentimientos y preocupaciones sobre el sentido y el propósito de nuestras vidas. Son cuestiones difíciles de abordar, que pueden hacer que nos sintamos atrapados. No tenemos claro cómo reaccionar o qué dirección tomar, lo que puede influir significativamente en nuestra vida si estos sentimientos continúan o aumentan.
 
A veces se considera que las crisis existenciales influyen negativamente en la vida. Sin embargo, a menudo pasamos por alto los efectos beneficiosos que pueden tener. Por ejemplo, una crisis existencial nos permite reconectar con nuestros valores, significado y propósito y con lo que queremos crear en nuestras vidas. Esto puede ayudarnos a evaluar, planificar y adaptar nuestras actividades y dirección para vivir la vida que queremos y con la que estaremos satisfechos.
 

¿Son comunes las crisis existenciales?

El hecho es que las crisis existenciales son más frecuentes de lo que se imagina, y no conocen límites en cuanto a edad o género. Todo el mundo se enfrentará a una crisis existencial en algún momento de su vida.
 
Entonces, ¿qué ocurre con ellas? Por lo general, se producen cuando, como seres humanos, nos enfrentamos a situaciones, cambios o transiciones en nuestras vidas a las que nos resulta difícil adaptarnos o que nos hacen cuestionar si éste es el camino que queremos seguir. Tanto si estos cambios son intencionados como si no, podemos experimentar restricciones que nos hacen dudar del camino que siguen nuestras vidas.
 

Cómo saber si está pasando por una crisis existencial

Cuando las personas atraviesan una crisis existencial, a menudo se sienten desorientadas, inquietas y han perdido el contacto con sus valores y su propósito en la vida.
 
Puede que te sientas así y te preguntes si estás pasando por una depresión o por una crisis existencial. Aquí hay cinco síntomas de que puedes estar pasando por una crisis existencial:
 

1. Ansiedad constante

Puede que estés lidiando con pensamientos y tristeza existencial que no puedes ignorar en tu vida diaria. Si no te distraes con nada, tu mente tiende a hacerse las mismas preguntas y tener las mismas ideas.
 

2. Síntomas de ansiedad y tristeza

Estos sentimientos desagradables surgen como resultado de una preocupación persistente. Nuestras ideas influyen en nuestras emociones y, en consecuencia, en la reacción de nuestro cuerpo. Como resultado, estas ideas recurrentes nos hacen sentir nerviosos y deprimidos.
 
Si permitimos que las crisis existenciales se salgan de control, pueden perjudicar seriamente nuestra salud mental.
 

3. Pérdida de motivación

Nuestra motivación surge de nuestro “por qué”: por qué hacemos lo que hacemos. Podemos experimentar una falta de motivación si nos cuestionamos nuestro “por qué” y sentimos que aún no conocemos la solución. El sentimiento de alienación y falta de sentido que conlleva una crisis existencial hace que sea difícil entender el propósito de hacer algo.
 

4. falta de energía

Nuestros niveles de energía pueden bajar debido al estado de ánimo, el sueño y la alimentación. Cuando nuestro estado de ánimo es malo, no nos apetece movernos ni hacer tantas cosas como de costumbre. Según la primera ley del movimiento de Newton, “Un objeto en reposo permanece en reposo, y un objeto en movimiento permanece en movimiento”. Esto puede servir de metáfora para comprender mejor nuestro cuerpo. Cuanto menos nos movamos y participemos en actividades, más difícil será levantarnos y hacerlo, y por tanto menos energía tendremos.
 
Nuestros niveles de energía se verán afectados si tenemos un patrón de sueño errático o una dieta irregular. Por lo tanto, haz que tu sueño y tu alimentación sean una prioridad, ya que pueden influir en tu salud mental, como muchos otros factores.
 

5. Reducción de la actividad social

La falta de entusiasmo y energía también puede provocar esto, afectando gravemente a nuestra salud mental. Nuestros vínculos sociales son un componente esencial de nuestra sensación de apoyo y cercanía, y su ausencia puede hacer que nos sintamos solos y aislados. Esto contribuye a los síntomas de ansiedad y depresión.
 

¿Qué factores contribuyen a una crisis existencial?

Los motivos de una crisis existencial difieren en función de la vida, las circunstancias, las ideas y los objetivos del individuo. He aquí algunos ejemplos de situaciones que pueden conducir a una crisis existencial:
 

1. Cambios importantes en la vida

Esto puede implicar desde tener el primer hijo hasta trasladarse a otro país. Pero, por supuesto, no todos los cambios significativos provocan una crisis existencial. También varía según el individuo, así que ¿qué factores influyen en que sintamos esto con un cambio concreto?
 
La importancia de un acontecimiento de la vida en términos de nuestra dirección y propósito determina si causa o no una crisis existencial. Si el cambio no está en consonancia con nuestro propósito -o nos hace dudar de él-, podemos empezar a sufrir una crisis existencial.
 

2. Giros inesperados

Esto se asemeja a una transición vital importante. Sin embargo, un giro inesperado es una transformación imprevista que se produce de forma inesperada y sin previo aviso. Por ejemplo, podemos ser despedidos de un trabajo en el que creíamos estar progresando significativamente, o nuestros objetivos vitales pueden ser pospuestos por una razón inevitable (la pandemia de COVID-19 es una de las grandes que me vienen a la mente).
 

3. Insatisfacción con el curso de nuestra vida

Esto puede ocurrir en cualquier situación si nos detenemos a reflexionar sobre nuestra vida y nos damos cuenta de que ya no deseamos recorrer un camino determinado. Por ejemplo, podemos descubrir que nuestra profesión actual ya no nos sirve y que necesitamos algo nuevo que nos haga felices.
 

4. La sensación de estar fuera de control

La pérdida de control puede hacernos sentir como si estuviéramos en medio de la furiosa corriente de un río, sin nada a lo que agarrarnos para mantenernos estables y por encima del agua. Como en esta metáfora, la falta de control puede hacernos sentir que no somos dueños de ningún elemento de nuestra vida. Nos sentimos incapaces de ir en otra dirección que no sea la que nos lleva la marea.
 

5ª. Pérdida

Tanto si se trata de la muerte de un familiar como de una ruptura que nos hace sentirnos aplastados, la pérdida de alguien cercano a nosotros puede producir una crisis existencial. Esto es especialmente cierto si este individuo era una piedra angular en nuestra vida.
 

¿Cuáles son las manifestaciones de una crisis existencial?

1. Estar preocupado

Siempre estamos pensando en el sentido y el propósito de nuestra existencia, lo que puede repercutir negativamente en nuestra salud mental.
 

2. Sufrir de ansiedad o depresión

Esto es causado frecuentemente por rumiar las ideas desagradables que llenan nuestro cerebro mientras nos sentimos perdidos.
 

3. Falta de motivación

No queremos hacer las actividades que antes nos gustaba hacer.
 

4. Reducción de la actividad social

Hacemos menos arreglos para visitar a nuestros amigos y seres queridos, y empezamos a pasar menos tiempo desarrollando esas conexiones, que son pilares fundamentales de nuestro sistema de apoyo.
 

5. Sensación de estar perdido y fuera de control

Cuando perdemos el contacto con nuestras creencias y propósitos, podemos sentirnos frecuentemente desconectados de nosotros mismos, como si estuviéramos en una cámara oscura sin interruptor de luz.

6. Abuso de sustancias

Es posible que nos encontremos bebiendo más o consumiendo otras drogas para distraernos de los pensamientos repetidos o para hacernos sentir algo diferente.
 

Las crisis existenciales y sus múltiples manifestaciones

1. El significado de la vida

Durante una crisis existencial, nos cuestionamos nuestra vida y su propósito. Empezamos a preguntarnos para qué sirve todo y a reflexionar sobre nuestra razón última para vivir la vida que llevamos.
 

2. Contemplar nuestros ideales y motivaciones

Esta crisis suele producirse cuando nos encontramos en una bifurcación del camino y no estamos seguros de qué camino elegir. Creemos que debemos examinar los valores sobre los que construimos nuestra vida, ya que puede que no estemos encantados con los que hemos seguido hasta el momento.
 

3. Cambio de vida significativo

Cuando nos encontramos con una transición que nos obliga a redirigir nuestra vida, podemos sufrir una crisis existencial. Esto puede ocurrir si el cambio no estaba previsto, o si tenemos que adaptarnos a él y redescubrirnos a nosotros mismos.
 

4. Sufrimiento

Hay tristeza, y con el dolor, puede haber una crisis existencial con cada pérdida. Cuando nos enfrentamos a una pérdida y a una realidad sin alguien o algo, podemos empezar a cuestionar cosas que nunca antes habíamos cuestionado.
 

5. Mantener nuestra integridad

Es común sentir que nuestras acciones se alejan de la persona que queremos ser en la vida. Este tipo de crisis existencial puede ayudarnos a revisar nuestros valores y reorientar (si es necesario) aquellos que nos mantengan fieles a la persona que queremos ser.
 

Ocho estrategias para superar una crisis existencial

1. Apoyarse en la familia y los amigos

Cuando nos enfrentamos a una crisis existencial, necesitamos la ayuda de nuestros amigos y familiares. Pueden hacernos sentir menos solos y proporcionarnos una aportación externa que puede ayudarnos a superar nuestra soledad.
 

2. Describe tus sentimientos

No te guardes tus emociones ni descartes lo que sientes. Es fundamental que prestes atención a lo que te dice esta catástrofe y al motivo por el que se produce. Puedes obtener importantes recompensas si lo consideras un aliado en lugar de un adversario. Anota tus ideas y preguntas existenciales y analízalas para saber qué es lo que intentan decirte.
 

3. Encuentra el deleite en lo aparentemente insignificante.

Cuando estamos en medio de una crisis, puede parecer que todo es gris, y nos puede resultar difícil apreciar las cosas que solíamos hacer. Te sorprenderá lo mucho que puede ayudar el agradecimiento en estas situaciones. Intenta escribir lo que agradeces al final del día, y encuentra el deleite en las pequeñas cosas.
 

4. Concéntrese en lo que puede controlar.

En una crisis existencial, es fácil sentirse fuera de control. Sin embargo, concentrarse en lo que puedes controlar puede ser muy enraizante. Una vez que te hayas concentrado en ello, evalúalo y toma el control de lo que puedas. Y en cuanto a las cosas sobre las que no tienes control, déjalas ir.
 

5. Mantén un cuaderno de gratitud

Utiliza un bolígrafo y un papel para anotar todas las cosas que puedas por las que estés agradecido. Pueden ser grandes o pequeñas. Por ejemplo, puede agradecer su salud, su casa o un trago de agua pura. Esto te ayudará a reconectar con tu vida (que es bastante fantástica si lo piensas) y a reconectar con tus creencias y tu propósito.
 

6. Realiza ejercicios de atención plena y meditación.

Este es un método excelente para conectar con tu interior y permitir que tus ideas florezcan y sean exploradas. La meditación puede ayudarnos a recuperar nuestro sentido de autoconciencia y de arraigo.
 

7. Participar en un grupo de apoyo

La conexión es el remedio a la angustia existencial. Reunirse con otras personas, escucharlas y compartir su historia puede ayudarle a afrontar la pérdida, los sentimientos de soledad o lo que sea que esté causando su crisis existencial.
 

8. Redescubre el propósito de tu vida.

La ansiedad por vivir una existencia sin sentido es la base de nuestros problemas existenciales. Esto suele estar motivado por la frustración. Reconectar con tu deseo de marcar la diferencia en el mundo puede ser un momento decisivo en tus preocupaciones existenciales.
 

¿Cuándo hay que ir con un especialista?

Varios de los síntomas de una crisis existencial son compartidos con otras condiciones de salud mental, como la tristeza y la ansiedad. Si eres propenso a la depresión o a los episodios de ansiedad, puede ser difícil determinar el origen de tus síntomas sin la ayuda de un experto. Extrema la precaución si tienes alguno de los siguientes sentimientos o experiencias:
 
  • Tiene la sensación de ahogarse.
  • Las ideas de falta de sentido están consumiendo su vida.
  • Tus emociones están interfiriendo en tu existencia diaria (incluyendo la higiene, las relaciones o el trabajo)
  • Tu salud mental o tu bienestar se ven gravemente perjudicados.
  • Te estás automedicando con drogas ilegales o alcohol.
  • Tienes tendencias suicidas, especialmente si tienes un plan.
  • Si te identificas en alguno de estos signos, busca rápidamente la ayuda de un experto en salud mental. No está obligado a pasar por este procedimiento solo.
 
Los sentimientos de ansiedad existencial son comunes, y todo el mundo los tiene en algún momento de su vida. Por desgracia, la terapia existencial es una especialidad de ciertos consejeros. Sin embargo, hablar con un profesional sobre tus preocupaciones puede ayudarte a encontrar claridad y a reconectar con el propósito de tu vida.
 

No estás obligado a sentirte así.

Estar en medio de una crisis existencial puede ser una experiencia aislada. Sin embargo, puede ser un momento decisivo en la vida de una persona. Encontrar métodos para reconectar es la cura a las emociones de desapego, insatisfacción y falta de sentido. Pasa tiempo con tu familia y amigos, contacta con un terapeuta o incluso juega con tu mascota. No estás solo, y tu vida es más importante de lo que crees.